¿Sustituir o reparar el paragolpes?
A la hora de reparar un paragolpes, podemos encontrarnos ante diferentes escenarios que determinarán el proceso de trabajo a realizar. El tamaño de la pieza, el acabado que presente (color, textura, etc) y sobre todo la gravedad del daño serán factores que debemos valorar en conjunto antes de reparar un parachoques.
En casos en los que el paragolpes presente grandes defectos, y cuya reparación no pueda llevarse a cabo o implique un tiempo de trabajo y consumo de producto excesivo, será necesario realizar una sustitución completa de la pieza por una de nueva fabricación.
El tamaño de la pieza, el acabado y la gravedad del daño serán factores que debemos valorar en conjunto
De este modo, en los procesos de pintado de un paragolpes nuevo, podemos diferenciar entre dos escenarios que determinarán los pasos a seguir.
Paragolpes imprimado y sin imprimar
Paragolpes nuevo imprimado: actualmente son mayoría los fabricantes de automoción que suministran los paragolpes u otras piezas de la carrocería con una capa de imprimación incorporada, lo que facilita el ahorro de tiempo y material, al ser posible aplicar directamente la pintura de acabado sobre la pieza.
Paragolpes nuevo sin imprimación: existen otros casos en los que el paragolpes no contiene esta capa de imprimación que facilita en anclaje de capas posteriores, por lo que será necesario preparar el fondo de la pieza mediante la aplicación de una imprimación o promotor de adherencia para plásticos.
Proceso de reparación y pintado de paragolpes delantero
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Si los daños en la pieza no revisten excesiva gravedad y se considera rentable su reparación, no será necesario sustituir la pieza dañada por una nueva.
En estos casos será necesario seguir una serie de pasos que nos ayuden a obtener una reparación eficiente y de calidad.
1. Valorar el alcance del daño
Examinamos con detenimiento los desperfectos de la pieza. En el ejemplo del vídeo no sería necesario soldar el paragolpes ni emplear adhesivos, ya que la estructura de la pieza se encuentra intacta. Para una mayor comodidad y un mejor resultado de la reparación, recomendamos desmontar el paragolpes de la carrocería.
2. Identificar el tipo de plástico
Comprobamos el código del tipo de plástico situado en la parte interior del paragolpes. Si es un tipo de plástico que ofrece compatibilidad con la capacidad de adherencia del aparejo a emplear (especificado en la ficha técnica del producto), no sería necesario aplicar previamente el promotor de adherencia.
3. Limpiar en profundidad
Limpiamos la superficie con agua y jabón. Empleamos un desengrasante especial para plásticos que nos asegure la limpieza en profundidad del paragolpes.
4. Lijar los bordes del daño
Utilizamos un grano de lija P150 o P220 y una esponja abrasiva. Soplamos los restos del lijado y volvemos a desengrasar en profundidad la superficie. Si durante el lijado del paragolpes hemos llegado al plástico “vivo”, aplicamos un promotor de adherencia con el fin de optimizar la adherencia de la masilla sobre la pieza.
5. Aplicar y lijar la masilla para plásticos
Mezclamos y aplicamos una masilla para plásticos que ofrezca facilidad de aplicación y lijado, así como un excelente poder de relleno y finura. En este caso recomendamos utilizar la masilla para plásticos MASI-FLEX de BESA.
Una vez seca, lijamos y nivelamos la superficie con un papel abrasivo de afinamiento P320/P400. En los lugares y recovecos de difícil acceso, utilizaremos una esponja abrasiva. A continuación, volvemos limpiar y desengrasar la pieza.
6. Aplicar el promotor de adherencia
En primer lugar, deberemos comprobar a través de la ficha técnica la compatibilidad del tipo de plástico del paragolpes con el aparejo a emplear en la reparación. Si no es compatible, aplicamos sobre la pieza el promotor de adherencia para plásticos 895 de BESA, que nos ayudará a optimizar el anclaje de la pieza. Recomendamos realizar una aplicación uniforme y regular, para evitar posibles defectos de pintura como descuelgues.
7. Aplicar y lijar el aparejo
Aplicaremos un tipo de aparejo u otro en base al tipo y tamaño de la reparación. Así, en reparaciones de menor tamaño, podremos hacer uso de un aparejo en spray, que nos facilite la ganancia de tiempo. En una reparación estándar optaremos por un aparejo lijable de altos sólidos que ofrezca excelentes prestaciones en términos de adherencia, rapidez de secado y lijabilidad.
Para el lijado del aparejo en sistemas bicapa utilizamos un grano P400.
Volvemos a limpiar y desengrasar nuevamente la pieza.
8. Aplicar la pintura de acabado
Como último paso, aplicamos la base de color y el barniz final, respetando los tiempos de secado estipulados en ficha técnica, y teniendo en cuenta factores como la temperatura y la humedad del ambiente.